Motor

Un 70% de directivos europeos del automóvil no recomienda la compra de un vehículo diésel

Atasco en la ciudad china de Schenzhen. MANU ARENAS

El 70% de los ejecutivos del sector de la automoción y sus usuarios en Europa Occidental creen que el diésel no es una buena opción de compra, según se desprende de la encuesta del Informe Global de Automoción 2018 de la consultora KPMG, que recoge las opiniones de más de 900 directivos del sector y más de 2.100 usuarios de 43 países, entre ellos España. Entre los españoles de la encuesta, el porcentaje de la no recomendación de compra de un coche diésel se eleva al 79%.

Sin embargo, el diésel no está muerto para la industria, ya que el 50% de los ejecutivos encuestados afirma que es "tecnológicamente viable", si bien el informe concluye que "socialmente es inaceptado".

Desde KPMG inciden en que las fábricas europeas con un 50% de producción de turismos diésel, junto a Europa Oriental (36%) son las que más exposición tienen a la paulatina caída del diésel. No obstante, explica que "es dudoso que los intereses políticos, corporativos y nacionales se alineen sin problemas con los ideales ecológicos".

Pero la caída de ventas de vehículos diésel puede hacerlos perdurar en el tiempo. Su menor demanda hará caer los precios del carburante diésel, lo que provocaría un repunte en la comercialización de coches de gasóleo. De los ejecutivos, el 72% cree en un equilibrio entre el precio y el efecto de demanda del diesel a nivel mundial. Los primeros signos ya son medibles: en Japón, país natal de los híbridos, la demanda de automóviles diesel está aumentando significativamente, impulsada por las ventajas de los costes.

Sí dice KPMG que el diésel desaparecerá en los vehículos pequeños, mientras que perdurará en los grandes todocaminos y en las marcas premium, donde su mayor precio compensa el coste de los sistemas de eliminación de NOx.

Y concluye que "el continuo incumplimiento de las normas ecológicas continuará reduciendo la aceptación social del diésel, que ni siquiera puede ser compensado por los beneficios económicos".

Eléctricos

Como alternativa, el híbrido es la mejor opción de compra en los próximos cinco años. Y de cara al futuro, se impone el eléctrico que en 2040 será mayoritario pero con un 28%, siendo todavía la segunda elección, con un 25%, los vehículos de combustión interna.

Para ejecutivos y usuarios, uno de los problemas clave de los vehículos eléctricos es su elevado coste; al mismo tiempo que en el tema del vehículo autónomo falta regulación. Para la inmensa mayoría existe un problema con la infraestructura de recarga que se debe solucionar primero para que llegue la movilidad eléctrica.

El 55% de los ejecutivos encuestados cree que los vehículos eléctricos no se implementarán por el problema de las infraestructuras. El informe recuerda que Noruega ha tenido problemas por este motivo, siendo un mercado líder en este tipo de vehículos. "En septiembre del año pasado, los funcionarios noruegos recomendaron abstenerse de comprar automóviles eléctricos nuevos,debido a la escasez de puntos de carga pública".

En cuanto a fabricantes, los ejecutivos ven a BMW como líder en movilidad eléctrica. "Ha fortalecido su posición al aumentar la brecha con Tesla, que se estabilizó en segundo lugar del ránking", dice el informe. Tercera es la china BYD que da un salto en la clasificación, desbancando a Honda, que fue tercera en 2016.

Cooperación tecnológicas y automovilísticas

En cuanto a la colaboración entre la automoción y las compañías tecnológicas, se impone el trabajo en equipo a la rivalidad. "Los 50 grandes fabricantes de automóviles representan un 20% de la capitalización bursátil de las 15 mayores tecnológicas. En 2010, suponían un 40%", según Francisco Roger, socio responsable de Automoción de KPMG en España, con lo que las tecnológicas abocan a los grupos automovilísticos a la cooperación.

Además, el 74% de los ejecutivos prevé que el porcentaje de automóviles fabricados en Europa Occidental (actualmente, el 16%) caiga por debajo del 5% en 2030.

En cuanto a la distribución, el 56% de los directivos estima que entre un 30% y un 50% de los concesionarios físicos de vehículos podrían desaparecer del mercado de cara al año 2025.Según el informe de KPMG, su supervivencia estaría ligada a los servicios de mantenimiento del vehículo y a la venta de automóviles de segunda mano.

Datos

Por otra parte, los datos van a cobrar cada vez más importancia y van unidos a la mayor implementación de los vehículos conectados. Más del 80% de los ejecutivos está convencido de que el uso de los datos extraídos de los vehículos y los conductores será la base del futuro modelo de negocio de la industria automovilística.

Esto implica redefinir el concepto de equipamiento de serie: según el 85% de los ejecutivos y 3 de cada 4 clientes, la seguridad cibernética y de los datos será una condición indispensable para adquirir un coche en el futuro.

En el lado de los clientes, el 55% de los usuarios estaría dispuesto a ceder su propio coche si pudiera acceder a una oferta de vehículos compartidos más amplia y si fueran más fáciles de usar.