Vida
Cafetería inclusiva Shalom: un proyecto que da empleo a personas con discapacidad que son parte del Comité Pro Ciegos y Sordos de Guatemala.
El Benemérito Comité Pro Ciegos y Sordos de Guatemala y la Embajada de Israel inauguraron la Cafetería Inclusiva Shalom, que brinda oportunidades laborales a personas con discapacidad visual y auditiva. Las plazas son remuneradas y serán rotativas cada año. ¡Qué chilero!
La cafetería también servirá como lugar de prácticas para los estudiantes de la Escuela Técnica Talento Sin Límites Ruth Nicolle de Powell, que estudian cocina y repostería.
El restaurante atenderá a pacientes y se personas que se albergan en el Hospital de Ojos y Oídos Dr. Rodolfo Robles Valverde, y a colaboradores del Benemérito. También se brindarán alimentos gratuitos a los estudiantes de los centros educativos y de rehabilitación pertenecientes al Benemérito Comité que comparten el complejo.
La cafetería será dirigida por personas con discapacidad que estudian en la Escuela Técnica Talento Sin Límites Ruth Nicolle de Powell, como reposteros y cocineros quienes recibirán remuneración por sus servicios y rotarán sus plazas cada año para dar más oportunidad. ¡Qué bonita iniciativa!
La cafetería inclusiva fue construida por el Benemérito Comité Pro Ciegos y Sordos de Guatemala y equipada con ayuda de la Embajada de Israel en Guatemala y la Agencia de Cooperación Internacional del Ministerio de Relaciones Exteriores del Estado de Israel – MASHAV-.
Inició a funcionar en mayo de 2017. Es un espacio en el que las personas con discapacidad visual y auditiva se capacitan con técnicas culinarias con un enfoque empresarial, para promover la inclusión social.
La escuela ofrece cursos como: gastronomía básica, repostería, panadería, montaje de eventos, administración de recursos de cocina, manejo de equipo, seguridad alimentaria, entre otros y va dirigido a personas con discapacidad visual y discapacidad auditiva de 15 años en adelante.
Puedes visitar esta cafetería en la Diagonal 21, 19-19 Zona 11, Anillo Periférico. ¡Sin duda estas iniciativas nos llenan de orgullo!