ECONOMÍA
LABORAL
Un 35% más que en 2012

Las bajas laborales por enfermedad profesional se disparan a su cifra récord

Actualizado
Dos operarias limpian un apartamento.
Dos operarias limpian un apartamento.

Desde 2012 hasta 2018 las bajas laborales por enfermedades profesionales se han disparado un 35% -de 7.466 a 11.382-, cifras que van en consonancia con la evolución de las solicitudes. Si hace siete años se procesaron 15.644 partes, en 2018 la cifra se situó en 24.082. En lo que va de 2019, de enero a agosto, ya se han notificado 18.585 partes para empezar el trámite de incapacidad temporal, por lo que se prevé que este año se superen incluso las cifras de 2018.

Pedro Pablo Sanz Casado, director gerente de la Asociación de Mutuas de Accidente de Trabajo (AMAT), hace hincapié en que, si bien este incremento corresponde a la recuperación del mercado laboral que se ha producido en los últimos años, «también hay que tener en cuenta que debido a la entrada en vigencia -el 1 de enero de 2019- del Real Decreto 28/2018, hay cambios en la cobertura social de los trabajadores autónomos, extendiéndose de forma obligatoria la cobertura por enfermedades profesionales».

A pesar de esta subida continuada, las cifras publicadas por el Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social no reflejan la realidad, según el coordinador de la Secretaría confederal de Salud laboral de UGT, José de las Morenas: «Lo que podemos observar es que sigue produciéndose una infradeclaración de las enfermedades profesionales que las mutuas siguen considerando como enfermedades comunes. Se dificulta el reconocimiento de las contingencias profesionales. Basta analizar el número de bajas por cáncer: ¿son realmente todos los casos a nivel nacional?», subraya.

Las últimas estadísticas dan cuenta de que, en lo que va de, año se han concedido 28 bajas laborales, de un total de 43 solicitudes, por enfermedades profesionales causadas por agentes carcinógenos, de los cuales 17 han sido causados por el amianto, también conocido como asbesto. Fueron los supervisores en ingeniería de minas, los peones de las industrias manufactureras, fontaneros, conductores de camiones y montadores de estructuras metálicas los que iniciaron en 2018 los distintos procesos, según datos de AMAT.

Enfermedades 'invisibles'

De las Morenas asegura que las enfermedades profesionales se mantienen invisibles frente a los accidentes laborales, dada la inmediatez de sus efectos. «En cambio, las enfermedades profesionales se ven con el tiempo. Incluso se acentúan y se agravan con los años debido a la exposición laboral por lo que hay una relación de causalidad», dice.

Bajas laborales por enfermedades

En 2018, los partes comunicados con bajas médicas sumaron 11.382, la cifra máxima desde 2009 (9.691). Este año no parece ser la excepción, pues 2019 registra un alza continuada con una variación interanual hasta agosto del 13,29% con respecto al mismo periodo del año anterior.

En cuanto a las provincias con mayores registros de bajas laborales, de enero a agosto, por enfermedad profesional, Navarra ha concentrado la mayor cantidad, con 141 casos por 100.000 habitantes en edad de trabajar. Le siguen: Guipuzcoa (87), Soria (75), La Rioja (74) y Murcia (70). Madrid se queda en 16 casos por 100.000 potenciales trabajadores.

Empleados de limpieza, mayoría

Con muñequeras, rodilleras y fajas. De todo se valen los trabajadores de limpieza para evitar las lesiones que conlleva realizar reiteradamente los mismos movimientos en una jornada laboral. Según las cifras publicadas por Trabajo, los empleados de este sector han obtenido el mayor número de bajas médicas por enfermedades adquiridas en la profesión, si se compara con otras ocupaciones. De un total de 8.753 bajas médicas concedidas de enero a agosto de 2019, 871 corresponden a limpiadores de oficina, de hoteles, de vehículos, ventanas, entre otros.

En 2018, los empleados de limpieza también encabezaron las solicitudes para un proceso de incapacidad temporal por enfermedad profesional, según la AMAT: 530 trámites.

A Ángela Muñoz, de la asociación de camareras de piso Las Kellys, no le sorprende que los empleados de limpieza lideren las cifras y que incluso superan ampliamente a los peones de la industria manufacturera, los operarios de maquinarias fijas y los trabajadores en industrias de alimentación, bebidas y tabacos. «El origen del problema viene de las condiciones de precariedad a las que estamos sometidas», cuenta Muñoz, que además incide en que es una profesión esencialmente femenina.

En lo que va del año, un total de 804 trabajadoras de limpieza accedieron a la baja laboral, muy por encima de los 67 hombres que lograron esta condición médica. Estos datos van en relación con las estadísticas de los últimos años: las mujeres se sitúan a la cabeza del ránking de bajas laborales por contingencias profesionales en toda España -de 3.631 en 2012 a 5.894 en 2018-.

Causas físicas

Si se analizan cada uno de los elementos que provocan las enfermedades profesionales con bajas médicas, la proporción es mayor en las causadas por agentes físicos -un 84% del total-. Posturas forzadas, tensiones musculares... En lo que va de año, ya han sido causa de 4.302 bajas de un total de 9.062 solicitudes. Esta categoría es la predominante porque la mayoría de los puestos de trabajos se enmarcan en el sector servicios y en la industria manufacturera.

De otro lado, las enfermedades profesionales causadas por inhalación de sustancias han representado, de enero a agosto del 2019, el 6% del total, seguidas de las enfermedades profesionales de la piel causadas por sustancias (4%), agentes químicos (4%), agentes biológicos (1,6%) y por agentes carcinógenos (0,4%).

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