Miles de españoles recorren hoy las calles hojeando compulsivamente el periódico e intentando no chocar entre sí mientras buscan la viñeta de Forges sobre el acontecimiento más relevante del día: la muerte de Forges. «A ver qué ha hecho con esto», se preguntan sus lectores, acostumbrados a digerir la actualidad a través de la mirada del humorista gráfico.
Las dificultades por encontrar hoy la viñeta de Antonio Fraguas han llevado a sus seguidores a colapsar la centralita de El País. «Seguro que la han tapado con algún anuncio. Es una vergüenza, precisamente hoy que ha muerto tendrían que haberlo publicado bien grande», se queja uno de ellos. En la calle, los quioscos también se han visto sobrepasados por la expectación de la gente, y los quiosqueros tampoco se explican por qué es tan difícil dar con la dichosa viñeta del día. «Estar tiene que estar, es Forges», asegura un dependiente.
A media mañana, la redacción de El País confirmaba que la viñeta aún no ha sido entregada, y se atribuye el retraso al ajetreo que habrá conllevado la propia muerte del autor. Aunque el dibujante se está haciendo esperar, en el periódico no hay preocupación porque «Forges cumple siempre pero hoy estará abrumado con el asunto de su fallecimiento, así que esperaremos».
Sus compañeros se niegan a presionar al admirado humorista y subrayan que “tiene toda la eternidad para pensar en la viñeta, no le agobiemos”.
De momento, miles de oficinas en España han dejado un hueco en sus corchos y no lo taparán hasta que Forges se haya pronunciado.