¿Qué necesita una vivienda más que cuatro paredes y un techo? Esta es la pregunta que Sadiq Khan, alcalde de Londres, se ha planteado para intentar solucionar el problema del acceso a la vivienda en la capital inglesa, donde los precios de compra son prohibitivos y los alquileres no paran de crecer. Los planes del consistorio pasan por subvencionar una nueva generación de casas desnudas que se pondrían a la venta por un 40% menos que las nuevas construcciones según informa The Guardian.

Estas nuevas viviendas no tendrán muros dentro, ni suelos de acabados de madera ni mármol, tan sólo contará con las instalaciones básicas necesarias para vivir, un baño y lo más parecido que tendrá a una cocina en su versión más primigenia será un fregadero. Lo positivo de estas casas que el Ayuntamiento londinense quiere proyectar será su precio: entre 150.000 y 340.000 libras (entre 176.000 y 400.000 euros aproximadamente), en una ciudad donde el precio medio de la vivienda nueva es de 580.000 libras (más de 680.000 euros).

El plan del Ayuntamiento para estas viviendas definidas como "genuinamente asequibles", es que el ciudadano medio tan sólo necesite gastar un tercio de sus ingresos brutos en el pago de una hipoteca. En España tan sólo se llegó a pagar un tercio del sueldo en el año 2007, justo antes de explotar la burbuja, según el Informe Tinsa de Mercados Locales del primer trimestre de este año, donde también se refleja que actualmente los españoles destinan de media un 21,7% de sus ingresos en pagar sus préstamos hipotecarios.

Proyecto piloto de 22 viviendas

Este proyecto de viviendas desnudas que pretende ser la solución habitacional para esta zona de Inglaterra, comenzará con un programa piloto con la construcción de 22 apartamentos en tres lugares de Enfield, un municipio del norte de Londres, donde se construirán las primeras viviendas en garajes y parkings abandonados. Khan ha concedido medio millón de libras (casi 590.000 euros) para la construcción de este experimento.

El ideario de las casas sin paredes interiores, se agrupan en el proyecto Naked House -Casa Desnuda-, que nace con tres ideas: Mantener el precio asequible, hacerlo tú mismo y construir una comunidad. Este grupo de treintañeros, de la conocida como "generación del alquiler", ha visto como el precio de la vivienda ha ido creciendo constantemente en Londres en las últimas décadas, haciendo inaccesible la compra de vivienda.

Simon Chouffot uno de sus ideadores explica en The Guardian que "la idea es despojar a estas viviendas de todas las cosas que la gente no quiere. La gente quiere una construcción personalizada a sus gustos" explica Chouffot, con este nuevo método pueden "hacer que la gente customice sus casas ellos mismos y a su gusto".

Los precios de estos hogares piloto serán todavía menores porque los terrenos pertenecen al Ayuntamiento, y los compradores no verán este importe reflejado en el coste de las casas que estarán disponibles a partir de 2020.

El grupo conservador del Consistorio londinense ha recibido con escepticismo esta idea, ya que afirman que estas casas "están pensadas para solteros y parejas, no para familias con niños" según el conservador Andrew Boff.

Sin embargo, según el diario británico, el reducido precio de las viviendas hará que se forme cola para acceder a una de estas casas desnudas, dando prioridad el Ayuntamiento a los vecinos y trabajadores de Enfield. Además, los diseños austeros encajan con la nueva generación millennial, acostumbrada a estos especialmente por la época que les ha tocado vivir. La promoción de estas casas se aleja mucho del tradicional catálogo con cojines cortinas y florituras varias; una caja de herramientas, una bicicleta y un banco de trabajo dan imagen a la futura promoción de casas asequibles para los habitantes de la capital del Brexit.

El proyecto piloto será llevado a cabo por el estudio de arquitectura OMMX architects, cuyos diseños "responden directamente a los cambios exponenciales del mundo actual" según se definen a sí mismos.