Tipis, casas en el árbol o tiendas de campaña entre naranjos son susceptibles de convertirse en alojamiento para turistas de cara a este verano. | AIRBNB.COM

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Pasar las vacaciones en Mallorca alojado en tipis, tiendas de campaña compradas en grandes almacenes o en autocaravanas ya es una realidad gracias a las nuevas ofertas de Airbnb. Cualquier techo vale para acoger turistas. Y los precios son de lo más variado: desde los 10 a los 38 que puede suponer pasar la noche. Es el low cost alojativo llevado al extremo.

La oferta de viviendas y sus sucedáneos se multiplica exponencialmente mientras el Govern balear apura los tiempos para tener lista la Ley de Alquiler Turístico de cara a esta temporada, que ya está provocando serios problemas.

Mientras tanto, los más avispados ya han buscado alternativas al apartamento o casa de vacaciones. Con un trozo de terreno es posible montar un resort con varias tiendas de campaña adquiridas en grandes almacenes.

Ducha al aire

Así se vende Experience Nature Lapin y sus primos hermanos (Escargot, Lézard y Nandu), que en cada página de Airbnb ofrecen «vivir una experiencia en plena naturaleza de Mallorca, en pleno campo». En concreto en Algaida y al módico precio de 15 euros la noche.

Los servicios distan mucho de ser los que ofrece un hotel: barbacoa, ducha al aire libre y retretes ecológicos para vivir la naturaleza en toda su intensidad. Para inspirar a los clientes, una pintada en una de las piedras de los muros: Respect the nature. No es, por desgracia, el único ejemplo de picardía alojativa. En Llubí se oferta una coqueta casa en el árbol por 35 euros por noche. De dimensiones bastante reducidas, cuenta con el resto del campo para el resto de estancias. Por ejemplo, la ducha consiste en una manguera colgada de un árbol. Y el water es un coqueto (y ecológico) recipiente de madera rodeado de árboles. Los propietarios del inmueble ofrecen una «experiencia original y romántica en la naturaleza». Con el objetivo ecológico en mente, no permiten el uso de jabones y champús químicos.

Entre naranjos

Los huertos de toda la vida también pueden ser alquilados. Así sucede con la propuesta de Airbnb en Manacor, que bajo el título de ‘Acampa tienda en los naranjos’, dispone de una amplia tienda de cuatro plazas entre árboles frutales. También ofrece tiendas entre limoneros o algarrobos, a precios similares. Para aquellos que tengan su propia tienda de campaña, los anfitriones proponen alquilar un pedazo de terreno a diez euros la noche.

El tipi supone otra modalidad de tienda de campaña, disponible en Can Picafort por 38 euros cada estancia. Con un colchón de matrimonio en el suelo, dispone de comodidades tales como mosquitera.

También está disponible la opción de la autocaravana, que en Llucmajor se cotiza a 35 euros por noche. En vista de las reducidas dimensiones de la estancia, el salón se traslada al campo, con mesas y sillas de madera.

Los residentes

Estos ejemplos se asemejan a la situación vivida este verano pasado en Eivissa, donde cualquier techo era susceptible de ser alquilado. De ehcho, se alquilaron habitaciones a 500 euros el mes con derecho a balcón, una situación que se repetirá dentro de unos meses. Es más, tal y como se ha visto en esta recién finalizada ITB, el alquiler vacacional apunta ya como el gran protagonista turístico de la temporada.

Por desgracia, falta parque de viviendas alquilables a los residentes y empleados que, quién sabe, si también tendrán que alquilar tiendas de campaña para esta temporada.