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Tres hombres pasan ante el hotel, con la policía dentro.
Un grupo musulmán revienta una reunión de rivales en un hotel de Cartagena

Un grupo musulmán revienta una reunión de rivales en un hotel de Cartagena

Doce patrullas policiales evitan altercados entre fieles de la mezquita de Los Dolores peleados en apariencia por la gestión para comprar un local

Gregorio Mármol

Lunes, 5 de diciembre 2016, 01:13

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Doce patrullas de la Policía Local, Guardia Civil y Policía Nacional evitaron ayer altercados entre fieles musulmanes que se enfrentaron cuando un grupo de ellos se disponía a celebrar una reunión para tratar asuntos relacionados con la mezquita de Los Dolores en el Hotel Posadas de España, ubicado en el polígono Cabezo Beaza.

La reunión había sido convocada de manera discreta por uno de los líderes religiosos de la comunidad islámica de Los Dolores, que alquiló una sala de reuniones en el hotel y citó a cerca de setenta fieles afines para tratar sobre la inversión de unos 200.000 euros en la adquisición de una propiedad para sus actividades religiosas y culturales en el barrio, según explicaron fuentes de los cuerpos y fuerzas de seguridad consultadas por 'La Verdad'. Sin embargo, miembros de una facción religiosa rival se presentaron en el hotel a la hora de la cita acompañados de un centenar de marroquíes residentes en distintos puntos de la comarca. Pretendían evitar el encuentro con el argumento de que la gestión inmobiliaria en ciernes era poco transparente.

Sin embargo, las fuentes consultadas dieron poca credibilidad a los argumentos ofrecidos a los policías y achacaron el enfrentamiento a la pugna que hay entre familias religiosas en alguna de las principales mezquitas de la comarca, como es la de Los Dolores. Esa, como casi todas las demás, está vinculada al movimiento islámico Justicia y Caridad, cuyo objetivo es la instauración de un régimen radical regido únicamente por la ley islámica

La presencia policial durante casi una hora en la puerta del hotel evitó altercados, ya que la mayoría de los hombres que acudieron a impedir la reunión se marcharon rápidamente para no verse comprometidos a dar explicaciones.

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