Bebes y niños celíacos: síntomas y tratamiento
La celiaquía es una enfermedad intestinal muy común hoy en día que afecta al 1% de la población. Aproximadamente uno de cada 200 recién nacidos son celíacos. ¿Cuáles son los síntomas y tratamientos para los bebes y niños celíacos?
¿Qué es la celiaquía?
Esta enfermedad se produce por una intolerancia permanente al gluten, proteína que está presente en 5 variedades de cereales: trigo, centeno, cebada, malta y avena.
Como consecuencia a esa intolerancia, la persona sufre dolencias intestinales y una mala absorción de los nutrientes, por lo que es muy importante que cuiden mucho la alimentación para que no pueda derivar en malnutrición u otras enfermedades.
¿Cuáles son los síntomas?
La celiaquía es una afección que puede aparecer a cualquier edad, incluso en bebés o recién nacidos. En estos casos, debemos prestar especial atención a los posibles síntomas que puedan aparecer dado que los bebés no se pueden expresar y también nosotros mismos podemos confundir los síntomas con otro tipo de trastornos digestivos.
- Vómitos o diarreas frecuentes (Con muy mal olor o espesas)
- Retraso en el crecimiento
- Distensión abdominal
- Fatiga sin motivo aparente
- Cambios en el carácter o humor: se da una mayor introversión.
- Trastornos como la dislexia, la hiperactividad y el autismo.
- Leucopenia: disminución del número de leucocitos.
- Coagulopatías: problemas en la coagulación de la sangre.
- Trombocitosis: el aumento de plaquetas en la sangre.
- Defectos en los dientes y el esmalte dental.
Como padres, debemos estar atentos ante la aparición de uno o varios de estos síntomas después de que el bebé haya ingerido algún alimento con gluten.
En tal caso, lo que debemos hacer es acudir a nuestro pediatra para que sea él el que valore la situación y pueda diagnosticarlo de manera debida mediante un análisis de sangre o una biopsia intestinal.
¿Cómo se puede tratar?
Actualmente, el único tratamiento que se puede realizar ante esta dolencia es seguir una dieta libre de gluten. Es decir, la persona, niño o bebé que sea celíaca deberá eliminar de su dieta cualquier tipo de alimento que lleve harina en cualquiera de sus formas.
Sin embargo, hoy en día se ha avanzado mucho y existe mucha concienciación de esta enfermedad por parte de fabricantes, reposteros y cocineros en general, ya que cada vez se elaboran más platos libres de gluten (pan, pasteles, galletas, tartas, pasta…) y en los envases se informa al consumidor sobre si el producto tiene gluten o no. Son productos que son cada vez más fáciles de encontrar y están al alcance de todo el mundo.
Por todo lo demás, la dieta del niño o bebé tiene que ser igual que la de las personas adultas que sufren esta dolencia: productos lácteos, carne y pescado (sin rebozar), frutas, verduras, legumbres, azúcar, etc.
De todas formas, no es conveniente que auto diagnostiques la celiaquía en tu niño o bebé porque sospeches que la pueda tener ni decidas variar su dieta por tu cuenta, será tu pediatra el que te deba indicar cómo proceder y qué alimentos le debes dar a tu hijo en el caso de que realmente sea intolerante al gluten.
¿A quién afecta?
No existe un patrón fijo en el desarrollo de esta enfermedad, puede aparecer en cualquier momento y a cualquier edad.
Se calcula que actualmente afecta en torno al 1% de la población (las mujeres tienen el doble de posibilidades de que aparezca) y los síntomas son tantos y tan variados que en torno a un 75% de las personas celíacas no están debidamente diagnosticadas.